miércoles, 30 de junio de 2010

Noche (segunda parte)

La lluvia se hacía mas y más intensa, el perro parpadeaba por una gotitas que le molestaban en el ojo. Un viento arrasó a una bolsa de la calle; estábamos cubiertos por el techo pero algunas gotas nos caían casi con desprecio, como quien moja a dos solitarios por el solo hecho de hacerlos mover un poco para que nos sintamos vivos.
El perro suspiró, algo lo tenía cansado.
-Es duro acá, muy duro. Aún así lo prefiero-dijo.
-No se...la verdad que no lo se. A veces pensás en muchas cosas...pero bueno al fínal siempre terminás en que de última regís tu vida y al carajo.
-Es que somos seres sociables.
-Si, eso es lo duro precisamente.
-Hay que estar en la noches solo, leyendo un libro, tomando un fernet o un whisky y ver pasar la vida...
-Ver pasar?
-Si, ver pasar.
-Que te hace pensar que si no vivís con alguien "ves pasar" a la vida?
Pienso. Miro el cielo lluvioso.
-Ok, tenés razón, me dejé llevar por los mandatos sociales.
-Si, es verdad, te dejaste llevar. Se te metió tu abuela diciéndote "y vos? para cuando un ñietito?"
-Ja, sos un boludo pero si, claro que si. Es increible la presión "cariñosa" para con los mandatos, increíble.
-Yo me arreglaría con una radio si fuera hombre.
-Y que te pensás que hago?
-Tenés una?
-Una Noblex del año 53, que era de mi abuelo, funciona de maravillas.
-Que bueno! me encantaría tener una radio para escuchar a Victor Hugo a la mañana....y a la noche dejaría la radio en un dial al azar, la programación de la madrugada es apasionate, una lotería...esta lleno de esos programas que llamás y contás cualquier miseria de tu vida.
-Seee, una cosa como "me llamo Margarita, vivo en Belgrano y llevo horas mirando la ventana. No puedo dormir, nunca puedo, la noche me produce una mezcla de malancolía y soledad que no soy capaz de tolerar, pero también a veces lo disfruto, es raro...gracias por el espacio que nos dan a todos los que , como yo, no sabemos que carajo hacer de nuestra existencia cuando baja el sol"
-Ja, y de fondo escuchás el "fhsssssss" de humo del cigarrillo que larga, porque todos los depresivos fuman.
-Me hiciste reír, perro.
-Es lo que mejor me sale, la gracia.
La lluvia dejó de caer fuerte y ahora era solo una garúa, como al principio, como cuando me crucé al perro. Cuando hube de terminar el 5to cigarro me levanté y saludé al perro con la mejor de mis caras, el hizo lo mismo y se volvió a enroscar. Hice, una, dos veredas y a la tercera voltee. Seguía ahí. Volví, me paré de nuevo frente a él y pensé.
-Dale, venite a casa que hay un lugar en el que podés vivir sin perder la libertad.
Me miró sorprendido, mientras se rascaba la oreja con la pata derecha.
-Dale que entre solitarios nos entendemos. Y a la mañana podés escuchar a Victor Hugo.

7 comentarios:

Lola dijo...

el mejor amigo del hombre

Nada más importa dijo...

Hay me gusto mucho!!!

Esta muy bueno esto que nos estas regalando!

Besos Seba!

Tefilina dijo...

Víctor Hugo

Nada más importa dijo...

Curiosamente, hara cosa de dos meses empece un taller literario. El mejor que hay por aca, segun me dijeron.
Estaba necesitando algo de eso, un sitio donde expresarme de forma libre y sentir lo que provoca el hecho de que quien te lee, esta ahi, adelante tuyo, y no detras de una pc.
Al principio todo barbaro, me encantaba, pero despues como que se me torno aburido. Las tareas que dejaban eran diferentes a lo que me gusta hacer, y me veia obligada a tener que cumplir. Y si hay cosa que odio, es tener que escribir por obligacion, sencillamente porque no me produce ni me sale escribir nada.
Asi es que decidi dejarlo. Que bueno que vos hayas hecho tantos años.
Y bien, como ya te dije, me parecio muy muy bueno, lo que expusiste hasta ahora.

Besos!

malorita dijo...

el alby memesino..

SOL dijo...

No al nada más imprescindible y difícil al mismo tiempo, que poder combinar el hecho de compartir tu vida con alguien y al mismo tiempo respetar su libertad.
Muy lindo cuento, me gusto mucho.
Besos!

Anónimo dijo...

Muy bueno!